¿ Donde llevará el camino?
Llena de incertidumbre recorro el sendero
resignada ignoro el tiempo
mi voluntad ajena
obedece un sentimiento.
Ya no hay rabia, no hay dolor
sólo las cicatrices guardan memoria
abierta a cualquier emoción
indiferencia a las llamadas
amables y gentiles las palabras
y aunque sonría la cara,
protegido el corazón.
Guardo secreta ilusión
sé que llegará el momento
espera y calma
aliento que alimento
oculta sabiduría en busqueda
visible no es la luz
aún no encontré una atalaya
donde encender mi llama.
Mariant Iberi.
No sé que hay tras el recodo del camino.
Hace 9 años
3 comentarios:
Encontrarás esa atalaya aunque creo ya la encontraste hace tiempo y tu llama brilla y aún brillará más querida amiga. Precioso.
Un abrazo
Tu no necesitas una atalaya donde encender llamas, el talento de verdad se percibe aunque se oculte.
Un abrazo amiga.
Gracias Juana, gracias Geraldine en nombre de la autora y por visitar mi pequeño espacio dedicado a miradas.
Un abrazo
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