En este caminar errante recogiendo momentos, muchas veces instantes bellos de la contidianidad de las gentes que cruzan su universo con el mío y dejan que atesore la brevedad de un hecho, un acto, un gesto, una mirada o una sonrisa. Alimento de espíritu para plasmar y recordar más tarde.
El andar guarda tesoros ocultos en el camino, inperceptibles a veces para las prisas pero divinos para quien como yo tiene el tiempo de sentarse y abstraerse en la contemplación.
Consciente de la brevedad de la belleza, quizá en la inutilidad de su admiración si el momento se extiende pero es hermoso y grato si sabes que una vez disfrutado el deleite hay que continuar la marcha pero el instante queda y ya se alimentó el alma.
M.I
1 comentario:
Chica que escondido ésta este nuevo blog tuyo, lo he encontrado porque estaba enlazado en el de Aurora. Es precioso. Recuerda enlazarlo en el tuyo Asaysa. Me ha gustado mucho y la música me encanta.
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